Un buen proceso de embarrado de adhesivos pone en evidencia la calidad y finura del calzado, es común que en nuestra industria se confunda resistencia con dureza. Seguramente algunos de nosotros hemos comprado zapatos aparentemente “muy durables”, pero lo que logramos apreciar en algunos casos es que son muy rígidos, esto en muchas ocasiones se debe a un abuso en el embarrado de pegamentos para empalme, o para el pegado de la suela, incluso en el aparador encontramos zapatos con manchas de pegamento.
En este fascículo encontrarás las recomendaciones para que tu producto tenga una mejor presentación, evitando el lavado excesivo en el adorno, y sobre todo la aplicación correcta en pequeñas cantidades de adhesivos.